La vida del cristiano es como la del que
ya tiene fecha para casarse, que al principio del compromiso va poco a poco
involucrándose en los preparativos de la boda, pero cuando la boda está cerca
nota que tiene muchas cosas todavía que resolver y ahí se forma el corre-corre
porque falta poco tiempo para terminar los preparativos, así nos pasa a los
cristianos cuando se va acercando el momento de encontrarnos con nuestro Señor,
que nos faltan cositas por arreglar para estar listos para ese Glorioso día.
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