No te sorprendas cuando
las cosas te vayan aparentemente mal justo cuando más estás buscando de Dios,
porque a veces cuando buscamos intensamente de Dios para acercarnos más a Él, inmediatamente
nos vienen extrañas y sorprendentes adversidades, para moldearnos y dirigirnos,
en respuesta a nuestro deseo de consagración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario