No pienses que debido a que hace tiempo
que no ves a un hermano querido y apreciado, con quien frecuentemente compartías
las cosas sublimes de Dios, eso quiere decir que ese hermano no tiene tan buena
relación con Dios como la tenía antes. Quién
sabe, piensa que cabe la posibilidad de que sea tu relación con Dios la que ha
menguado, pues de lo contrario, si hubieses estado tan consagrado como lo
estabas antes, cuando tenías una buena relación con ese hermano, a lo mejor ya lo
hubieses buscado. No, si yo te digo,
juzgar es siempre peligroso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario