domingo, 6 de enero de 2013

El aparente triunfo terrenal

Pocas cosas son más ilusorias que el aparente triunfo terrenal, incluso en cosas de la iglesia, porque nos da un falso sentido de prepotencia que mella nuestra fe, en vez edificarla.  Cuando triunfamos en nuestras empresas, ya sean éstas seculares o relacionadas con la iglesia, pensamos que estamos bien, que Dios está con nosotros, pero la realidad es que frecuentemente Dios está más cerca de nosotros cuando nos sentimos derrotados, a pesar de estar buscándole, que cuando todo nos va bien y pensamos que es así porque estamos haciendo las cosas correctamente.  Lo más correcto que puede hacer un ser humano ante la prosperidad es humillarse ante Dios y nunca pensar que su aparente triunfo se debe a sus ejecutorias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario