martes, 11 de diciembre de 2012

Somos como un canario

A  veces pensamos que somos la gran cosa porque se nos concede el privilegio de poder buscar a Dios temprano en la mañana o tarde en la noche (por la noche nunca puedo, no tengo esa dicha), pero en realidad, meramente somos dichosos.  Si nos vanagloriamos porque buscamos a Dios a X o Y hora, somos como un canario que piense que hizo la gran cosa porque comió alpiste.  Si tienes la dicha de poder madrugar para buscar a Dios, eres meramente eso: dichoso.  Pero de héroe nada.  Seguimos siendo tan vulnerables a los vaivenes de esta vida, como todos los demás.  La única diferencia es que hemos comido alpiste, ni más ni menos.  Seamos sensatos y nunca pensemos de nosotros mismos más de lo que debemos pensar.  Que nos ayude Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario